Claves para una vuelta al cole saludable (II): Alimentación sana

Si el descanso es un factor clave en la salud de los niños, una alimentación saludable  es otro factor que va intrínsecamente unido a él.

Con la llegada del otoño y la vuelta al colegio los niños necesitan estar fuertes para rendir en su dia a día y evitar caer en los típicos contagios que tan frecuentes son durante la época escolar. Para eso, será fundamental que los alimentos que ingieran nuestros hijos durante cada comida refuercen su sistema inmunitario. 

A partir de los 5 años, las necesidades energéticas del niño son cada vez mayores, por eso la alimentación es tan importante. Además, siempre será de gran ayuda mantener unos horarios fijos, respetar la regla de cinco comidas diarias y evitar picar entre horas.

La dieta de los infantil deberá incorparar la fruta como elemento fundamental todos los días, a la que deberemos añadir verduras y hortalizas y legumbres dos o tres veces por semana, indispensables en una dieta saludable. Aunque resulte cómodo para meriendas y el descanso de media mañana, es importante evitar la bollería industrial que supone un aporte calórico muy alto y su combustión es muy rápida.

Todos sabemos que el desayuno es la comida más importante del día, por eso debe contar con hidratos de carbono (en forma de cereales y pan, por ejemplo) además de lácteos, fruta, grasas y azúcares. A media mañana es conveniente que el niño tome un zumo de frutas, o una pieza de fruta y un bocadillo. Este segundo desayuno o almuerzo le dará energía para afrontar la segunda parte de la jornada escolar.

En la comida, la ingesta debe contener proteínas, verdura u hortalizas, hidratos de carbono y fruta y en la merienda, los hidratos de carbono y los lácteos deberán ser los protagonistas. Para la cena, seguiremos el esquema de la comida pero de una forma más ligera para evitar que se vayan a la cama con el estómago demasiado lleno, que dificulta el sueño.

Si respetamos todos estos principios, tanto en casa como en el cole, sin olvidar que beban mucha agua, estaremos colaborando a que nuestros hijos se acostumbren a mantener una dieta y unos hábitos alimenticios saludables.