El herpes labial

El herpes labial es una infección vírica que pasa por diferentes fases:

Fase 1: Picor, escozor u hormigueo en la piel de los labios o cerca de la boca, seguida de un enrojecimiento.

Fase 2 : Aparición de unas vesículas pequeñas y llenas de un líquido claro.

Fase 3: Las vesículas se secan y aparece una costra amarillenta que, en última instancia, cae.

¿Cuál es la causa?

El causante del herpes es un virus que se transmite por contacto directo de persona a persona o a través de objetos contaminantes como los que se usan para comer o beber.

¿Cómo y cuándo desaparece y se reactiva?

En general, desaparece de forma espontánea después de una o dos semanas, pero se puede reproducri varias veces a lo largo de la vida de forma más o menos crónica.

Hay personas con una predisposición especial a presentarlo, y determinadas circunstancias pueden reactivar con más facilidad el virus (el virus queda latente en el propio organismo). Los motivos más frecuentes de reactivación son las situaciones de estrés, la fiebre causada por una enfermedad infecciosa, la menstruación o la exposición prolongada al sol (no sólo en verano, sino también en invierno).

¿Cómo puedo prevenirlo y curarlo?

Se pueden adoptar algunas medidas para minimizar los brotes y la duración de la erupción. Para ello es importante evitar las situaciones de estrés y aplicarse pantalla solar en los labios y sus alrededores ante la exposición solar (por ejemplo, al esquiar). Durante su proceso de exacerbación debemos lavarnos a menudo las manos para evitar el autocontagio a otras zonas. La aplicación local de antisépticos, astringentes o pomadas antivíricas (sobre todo antes de la formación de vesículas) tienden a disminuir las molestias. En caso de sufrir recurrencias muy a menudo, puede consultar el problema con su farmacéutico/a.