Poco a poco, vuelta a la rutina
Somos muchos los que ya hemos dicho adiós a las vacaciones de verano, y en ocasiones, la vuelta al trabajo después de este merecido descanso y desconexión puede suponer una incómoda sensación de decaimiento, irritabilidad y estrés.
Aunque no hay ninguna solución milagrosa contra el conocido síndrome postvacacional, existen una serie de factores que tienen influencia directa en nuestro estado de ánimo contra los que sí que podemos tomar medidas y una de ellas es nuestra alimentación. Sabemos de sobras que hay una serie de alimentos que, tras su consumo, nos provocan una inyección de energía y un aumento de optimismo, ayudándonos de esta forma a aliviar el estrés y el desánimo. Aquí van unas cuantas:
Vitaminas complejo B
La vitamina B6 favorece la producción de la serotonina en el cerebro, responsable de la sensación de bienestar, relajación, mayor autoestima y concentración. Además, esta vitamina favorece también la formación de hemoglobina en sangre.
Por su parte, la vitamina B12 mejora el estado de las células nerviosas y glóbulos rojos y favorece el equilibrio del sistema nervioso.
Encontramos vitaminas de grupo B en alimentos como pescados, mariscos, lácteos, huevos, brócoli, acelgas, espinacas, cereales y leguminosas.
Magnesio
Equilibra el sistema nervioso central y favorece la relajación del organismo. Los frutos secos, granos enteros y vegetales son buena fuente de este mineral.
Potasio
El potasio favorece el funcionamiento neuromuscular. El plátano y la patata son alimentos ricos en este mineral.
Triptófano
Este aminoácido, presente en las proteínas que contienen las carnes o la leche, es un efectivo ‘anti estrés’, dado que es precursor de la mencionada serotonina conocida, como la ‘hormona de la felicidad’.
Relajantes naturales
Hay infusiones a las que se les atribuye un efecto relajante y combaten el estrés (tila, valeriana). Un vaso de leche por la noche puede ayudarnos también a relajarnos y dormir mejor.
Leave a Reply
Want to join the discussion?Feel free to contribute!